La digitalización de la Pyme española se acelera. Con el verano llegando a su fin, toca sentarse y hacer balance.
Turismo, hostelería, pequeños comercios, e incluso las grandes superficies, se han visto perjudicados por la situación provocada por el Covid-19.
Según el último barómetro de ATA, cerca de 300.000 autónomos tiene previsto cerrar definitivamente a lo largo de este ejercicio. Este dato es preocupante, ya que el tejido de la pequeña empresa, aparte de suponer cerca del 11% del PIB nacional, es vital para miles de familias.
En el lado contrario encontramos las tiendas especializadas en tecnología, hogar y moda, las cuales han visto aumentada la demanda de sus productos. ¿Ambas tendencias están relacionadas?
¿se han modificado nuestros hábitos de compra?
Efectivamente, el cambio en los hábitos de compra de los consumidores se ha hecho evidente. Según varios estudios sociológicos, alrededor del 55 % de los encuestados afirman que han reducido y controlado sus gastos por miedo a un segundo confinamiento.
Por otro lado, la manera de comprar ha cambiado también. El 21% de la población afirma haber preferido comprar en comercios pequeños para evitar las aglomeraciones de los hipermercados y tienen previsto continuar haciéndolo. Si bien es cierto, que a medida que las tiendas online y los procesos de delivery mejoren, pocos querrán realizar sus compras acudiendo físicamente a los locales.
Y con todos estos datos, lo que está claro es que los pequeños comercios o se adaptan a las necesidades de los consumidores y a sus hábitos de consumo, o acabarán desapareciendo inevitablemente.
¿Cuáles son las principales herramientas para la digitalización de la Pyme?
Para ello, la presencia online con tiendas virtuales, renovación de equipos y herramientas de gestión y cambios organizativos son las principales herramientas de las que disponen los propietarios de estos locales de menor tamaño. Y no es momento de dejar pasar el tiempo con el pensamiento de “ver qué va pasando”.
Las grandes superficies y compañías ya están moviendo ficha. Inversiones como las de Mercadona, Amazon o Lidlponen de manifiesto que se están preparando para hacer frente a todos estos cambios en los consumidores. La digitalización de la Pyme ya no es una opción, es la única forma de su supervivencia.
La tecnología básica para el punto de venta de cualquier negocio está compuesta por un TPV, un programa de gestión de ventas y stock y un sistema inteligente de gestión de efectivo. Con el ahorro de tiempos, información sobre las ventas y movimientos de stock y la seguridad que aportan estos elementos al negocio, los propietarios verán cómo, aparte de rentabilizar la inversión en un tiempo mínimo, aumentarán los ingresos sin necesidad de que haya un mayor volumen de clientes.
Si está leyendo este artículo y desea recibir más información sobre cómo podría digitalizar y adaptar su negocio, no dude en ponerse en contacto con nosotros. Le atenderemos sin ningún tipo de compromiso y le asesoraremos en función del tipo de negocio que tenga.
